Pozi.
Se me juntó el lavado con el planchado. En cuanto nos volvió el alma al cuerpo compramos material y contratamos un Tizoc para arreglar el jardín y ahora me tengo que echar yo sola la obra. Peores cosas he hecho sola pero ya me había acostumbrado que mi ruquis me ayudara. Sea por Dios.
También estoy cociendo fabes desde ayer, para adelantar y no pelearme tanto con la Sra. Olla Express de Presto, que es de contentillo. Otro pendientito es que me falta algún regalo de comprar, otros de envolver y otros de hacer pero en eso estoy, ayer horneé dos charolas de mazapancitos que me quedaron medio duros, les regalaré a las que sí tienen muelas, porque como mi padre decía "Dios le da dientes al que no tiene quijadas". Todo esto viene regado de lavar, cocinar, retacar estómagos famélicos y demás artes de mi sepso.
Pero mañana es mi cumpleaños, se aceptan dádivas, regalos, ofrendas y obsequios mil.
Sabiduría de hoy: a cada capillita le llega su fiestecita, no deseperéis.
Paz y amor a los que tienen problemas, y a los que no también.
¿Nadie adivinó qué me regaló mi ruquis?
Feliz inicio del puente Guadalupe-Reyes.